El Army Doctrinal Publication (2012), del Ejército de los EE. UU., definió descriptivamente que se entendía por líder tóxico, concepto que por primera vez se le daba atención como conocimiento institucional en una organización militar.
El líder tóxico es una combinación de actitudes, motivaciones y comportamientos egocéntricos que tiene efecto adverso en los subordinados, la organización y el desempeño laboral. Este líder carece de preocupación por los demás y el clima de la organización, que conduce a efectos negativos a corto y largo plazo. (Army Doctrinal Publication, 2012).
Por otra parte, Bernardo Stamateas en su libro Gente tóxica, lo define como “todo aquel que potencia las debilidades, cargas negativas y frustraciones.”
Y efectivamente el líder tóxico no solamente guarda relación con una jefatura, sino también con un compañero de cámara o alguien de la dotación que por su personalidad impacta de manera negativa en el clima laboral.
¿Cómo se identifica a un líder tóxico?
Reed (2010) y Stamateas (2014) definieron las características de un líder tóxico, a continuación se detallan algunas:
¿Por qué un líder tóxico afecta de mala forma en una dotación?
Según Reed (2010), independientemente de cómo esté definido e identificado un líder tóxico, su impacto es negativo. En un estudio realizado en el ejército de los EE. UU. se identificó las siguientes consecuencias como impacto en el personal:
En una cultura organizacional que está asociada a respetar el rango y no al individuo, se premia la lealtad, por ende, el que se queja de su superior, no es bien recibido pudiendo interpretarse como una insubordinación (Reed, 2010).
En la Armada de Chile, a pesar de tener una estructura jerárquica donde se respeta el grado, se ha caracterizado y diferenciado de otras instituciones, porque en su cultura organizacional, a través de un conducto regular, está la instancia de que un menos antiguo pueda presentar su punto de vista al más antiguo.
Además, durante la carrera y en los cursos de liderazgo que actualmente se dictan en la Academia Politécnica Naval, tanto para oficiales como para gente de mar, se fomenta cultivar la autoridad formal* e informal*, de manera que un subordinado respete a un superior no solo por su grado, sino que también porque es una persona digna de admiración y lealtad, por sus valores y acervo profesional.
¿Qué puede hacer una persona que está sufriendo bajo un líder tóxico?
De acuerdo con el Modelo DISC, que es una metodología que permite estudiar el comportamiento natural de las personas delante de distintas situaciones y a contar de esto, sugiere cursos de acción para tratar a estas personalidades. La adecuada forma para tratar a un líder tóxico es:
El Dr. Joe Doty, en un estudio publicado en la Military Review (2013), indica que los líderes con las características antes mencionadas son carentes de inteligencia emocional, por centrarse en ellos mismos y no concentrarse en los demás.
Travis Bradberry y Jean Greaves (2009), indican que la inteligencia emocional es protagonista fundamental en el liderazgo, ya que al lidiar e interactuar con otros seres humanos, demanda una serie de elecciones y decisiones arbitrarias que diferenciaran un buen líder de un mal líder.
Por su parte Daniel Goleman (2005), señala que los lideres eficaces se distinguen por su alto grado de inteligencia emocional, lo que incluye la auto concienciación, auto regulación, motivación, empatía y destreza social.
El estudio de Doty (2013), concluye que la inteligencia emocional puede ser enseñada y aprendida, beneficiando el clima laboral en el lugar de trabajo, en cuanto a la capacidad de adaptarse a distintas situaciones, fomenta las relaciones públicas, se conoce mejor el equipo de trabajo y por ende facilita la eficiencia.
Independiente de querer ayudar al líder tóxico o no, hay que velar por el bien común de la dotación y en atención a eso, sensibilizar a este integrante que ya que tiene esta capacidad de influir en el resto, de manera negativa hasta el momento, con un cambio de actitud podría hacerlo ahora de forma positiva.
Buscar el lado positivo de las situaciones, identificar y observar al líder tóxico, aprender de ellos lo que no hay que hacer, sacar lecciones aprendidas y así revertir la situación a favor de uno.
Finalmente, reflexión personal, ¿el líder tóxico nace o se hace?; ¿Que hago cuando evidencio el liderazgo tóxico? y ¿he sido un líder tóxico?
Muchos lectores habrán lamentado el trágico accidente sufrido por el USS Fitzgerald en tránsito hacia Tokio en junio del...
El autor plantea el escenario actual y futuro que enfrentarán los futuros oficiales de marina y presenta una alternativa a analizar para reforzar la formación de líderes en la institución, tomando como base la experiencia de las FF.AA. de Nueva Zelanda.
A principios de la década de los 80 diversas investigaciones determinaron que aproximadamente el 70% de los accidentes en aviación eran producto del error humano. Analizando los factores humanos, se identificaron entre los principales motivos, el error en la toma de decisiones, problemas de comunicaciones interpersonales y la falta de un liderazgo adecuado en las dotaciones de vuelo. Fue así como en el proceso de dar una solución concreta al problema del factor humano se da origen al término Crew Resource Management (CRM), concepto asociado al proceso de entrenar y preparar a las dotaciones de vuelo para reducir las probabilidades de error, a través del uso eficiente y coordinado del recurso humano por medio de un liderazgo claro y definido en los equipos de trabajo.
Es en La Odisea, la épica obra griega de Homero, en donde Odiseo le confía la educación y formación de su hijo Telémaco ...
Versión PDF
Año CXXXVI, Volumen 137, Número 979
Noviembre - Diciembre 2020
Inicie sesión con su cuenta de suscriptor para comentar