Como saben, los oficiales subalternos tienen la posibilidad de ejecutar cursos con el Ejército de Chile y para su generación se presentan dos opciones, cursar material de guerra en Santiago o caballería blindada en Iquique, ambos cursos duran aproximadamente seis meses y se realizaran a contar de febrero del próximo año.Al momento de escuchar caballería blindada, se me vino inmediatamente a la mente la figura de un tanque, por lo tanto, antes que otro de mis carretas se adelantara, levanté la mano y solicité autorización para ser considerado en el curso. Pasaron los meses y en diciembre de 2011, en medio de mis vacaciones me contacta el segundo comandante del ex Destacamento IM N° 2 Miller, unidad a la cual había sido transbordado, y me da la orden preventiva de estar en condiciones de desplegarme a Iquique a contar del mes de enero. El 16 de enero arribé al aeropuerto de Iquique y en una hora me encontraba en la Escuela de Caballería Blindada, ubicada en pleno corazón de la ciudad, exactamente al lado del cementerio municipal, el cual más de alguna vez usé como punto resaltante después de no pocos eventos de camaradería. Iniciado el curso las presentaciones fueron breves y concisas, lo cual asocié a esa rivalidad institucional siempre presente entre las ramas de la defensa; sin embargo, no se trataba de eso: el curso ya estaba en el estadio de Iquique listo a rendir las pruebas físicas, y solo faltaba yo para iniciarlas. Una vez de vuelta en la escuela se me entregó el equipo militar que usaría en el curso: buzo de tanquista, elementos anti exposición a flamas, entre otros necesarios para desplegarnos en terreno. Entrando de lleno al curso, se nos explicó la malla que este contenía, basándose en dos ejes principales: técnico y táctico. El primero contenía principalmente materias asociadas a componentes técnicos del tanque, tales como telecomunicaciones, sistemas de armas y control de fuego, mecánica, funcionamiento del sistema oruga, conducción, entre otras materias. El eje táctico se basaba en la aplicación de los aspectos técnicos en un plano situacional de combate, ya sea en ejercicios de planificación o en ejercicios desarrollados no solo a nivel pelotón de tanques, sino que conformando unidades de tarea con el apoyo de unidades de ingenieros mecanizados e infantería blindada. [caption id="attachment_20255" align="aligncenter" width="576"]
Patio de formación de la escuela de caballería blindada en Iquique.[/caption]
Si bien las condiciones meteorológicas en Iquique son muy agradables en términos generales, las condiciones generales en la localidad de Pozo Almonte, lugar donde se ejecutaban los ejercicios prácticos, distaban de serlo. Esto debido a su lejanía con el océano lo que se traduce en un clima desértico - árido, con condiciones de temperaturas diurnas de un promedio de 31°C; y mínimas nocturnas que fluctúan entre los 0 y 3°C, además de la constante presencia de la denominada camanchaca, espesa niebla que se presenta generalmente entre las 05.00 h y las 08.30 h, reduciendo en algunas ocasiones la visibilidad a no más de 2 m.
Curso en la faena de munición antes de pasar a polígono.[/caption]
Cada alumno dispara una cantidad estándar de munición APDS (Armor Piercing Discarding Sabot) y HESH (High Explosive Squash Head) según corresponda a la apreciación que haga el comandante de tanque frente a los objetivos presentados.
La modalidad del tiro corresponde al tanque en condición estática y en movimiento frente a objetivos en las mismas condiciones, además de tiros nocturnos en condición estática. Recuerdo que la situación cambió radicalmente del simulador al tanque. Si bien el simulador permite realizar todos los procedimientos ejecutables en el tanque, la “chusca” genera condiciones de visibilidad muy desfavorables, sobre todo en los tiros en movimiento frente a blancos en movimiento, donde los sistemas de visibilidad y puntería ópticos se ven altamente interferidos, lo que afecta en el tiempo de detección y discriminación de los objetivos. Por otro lado, recuerdo las consecuencias de un impacto de munición HESH sobre un antiguo chasis de tanque Sherman durante la noche, básicamente, si el tiro es bien apuntado sobre el centro de masa del objetivo, la torre se descantilla generando una evacuación masiva de llamas, las cuales salen a gran presión desde los espacios disponibles en el tanque.
Terminado y aprobado este tiro de polígono los alumnos que aprobamos la asignatura fuimos calificados como comandante y artillero de tanque Leopard 1 V por el CECOMBAC. Por supuesto que en esta fase no solo eran horas de combate sobre simuladores, las cargas teóricas y pruebas escritas se realizaban en forma paralela, las cuales exigían conocer todos los componentes insertos en los sistemas del tanque.
[caption id="attachment_20257" align="aligncenter" width="692"]
Tanque efectuando sobrepaso por fuerza en centro urbano cercan al área de Humberstone.[/caption]
Paralelamente, el eje práctico comprende básicamente períodos en terreno donde se realizaron acciones a nivel pelotón, equipos de combate y polígonos en diversas condiciones. De mis recuerdos más latentes de este eje, están los períodos prácticos de planificación a cargo de un mayor de Ejército que nos mantenía dentro de una carpa de puesto de mando el día completo, bajo el sol iquiqueño, presentando nuevas situaciones tácticas las cuales debían ser resueltas en pocas horas, donde la exposición de la orden no discriminaba si era de día, noche o madrugada.
Otro gran recuerdo de este período, fue la conformación de equipos de combate empleando los tanques y unidades de infantería blindada, en los cuales más de alguna vez me tocó desempeñarme como comandante de unidad, realizando acciones de armas combinadas a grandes velocidades, atravesando incluso obstáculos artificiales en la pampa, movilizando una masa de acero de 50 ton, transformada en un sistema de armas. Cabe destacar que la conformación de unidades de tarea, con diversas capacidades, generaba una mejor capacidad de respuesta ante las situaciones tácticas que se planteaban durante la ejecución del entrenamiento, por ejemplo en terrenos despejados los tanques cubrían la vanguardia, empleando su armamento a su mayor alcance, objeto cubrir el avance de la Infantería, mientras que en situaciones dentro de áreas urbanas o con condiciones geográficas estrechas, los blindados aislaban la zona mientras que la infantería asaltaba y la aseguraba mediante un despliegue más flexible y ágil, característico de esta arma.
Todas estas situaciones, entre muchas más, le brindaron al autor una fuente valiosa de experiencias, las cuales pudieron ser aplicadas como comandante de la unidad de vehículos de combate y reconocimiento en los carros Scorpion, unidad que integra el Batallón de Apoyo Combate IM Nº41 Hurtado, de la Brigada Anfibia Expedicionaria, una vez terminado el curso, permitiendo actualizar procedimientos y contribuir al desarrollo de nuevas capacidades, incrementado el alistamiento operativo de la unidad.
Evento de camaradería a bordo de LM Riquelme.[/caption]
Cabe destacar que el jefe de curso, además de controlar el aprendizaje de los himnos propios del Ejército, también dispuso aprender el himno del Cuerpo de Infantería de Marina, lo cual daba claras señales del alto espíritu de camaradería que se vivía dentro de la escuela.
El espíritu de amistad militar y profesionalismo que se vivió durante el curso quedó de manifiesto al momento del egreso, cuando fuí condecorado con la medalla: Escuela de Caballería Blindada, la cual fue adjudicada por el desempeño general académico durante el período, pero por sobre todo por el espíritu de camaradería consolidado durante los seis meses con los tanquistas del Ejército de Chile.
El poder militar de un Estado, cuando se decide su empleo en el logro de un determinado objetivo, necesariamente debe ser proyectado hacia el área de interés. En este contexto, las operaciones de proyección desde el mar constituyen una de las formas más efectivas para lograr lo anterior, por la cercanía de los centros de poder y principales concentraciones humanas a los litorales, por las numerosas posibilidades que otorga el mar a la maniobra y por la flexibilidad de las fuerzas que tienen la capacidad de ejecutar este tipo de operaciones.
Versión PDF
Año CXXXX, Volumen 143, Número 1007
Julio - Agosto 2025
Inicie sesión con su cuenta de suscriptor para comentar.-