Por GUSTAVO JORDÁN ASTABURUAGA
En la guerra entre Rusia y Ucrania aparecieron las “embarcaciones kamikazes” controladas en forma remota por comunicaciones satelitales, capaces de atacar a buques de superficie. Los buques mercantes sin tripulación por sí mismos, considerando su tonelaje, podrían constituirse en “embarcaciones kamikazes” a futuro. Estas nuevas amenazas asimétricas deberían ser reconsideradas por su potencial efecto en el ataque y defensa de las líneas de comunicaciones marítimas y de los buques de guerra.
In the Russia-Ukraine war, “kamikaze naval drones” have emerged which remote-controlled via satellites, are capable of striking surface ships. On the other hand, crewless autonomous cargo ships which, considering their size, could eventually be turn into “kamikaze vessels”. These new asymmetric threats should be reexamined, considering their potential threat to sea lines of communications and warships.
En la Guerra entre Rusia y Ucrania se ha destacado por todos los medios de prensa y artículos especializados la gran influencia que han tenido los distintos tipos de drones utilizados en este conflicto (incluidos los “drones kamikazes”), no así la aparición de las “embarcaciones kamikazes” ucranianas cargadas con explosivos, las cuales son controladas en forma remota por comunicaciones satelitales y se autodestruyen al impactar a los buques blancos, logrando efectos relevantes en la guerra naval.
Desarrollo de los buques mercantes y de guerra no tripulados (o USV's)1
Desde hace varios años se han efectuado diversos experimentos y desarrollos para colocar en servicio buques mercantes sin tripulación, tema que ha sido abordado por la Organización Marítima Internacional y variadas empresas privadas.
En enero de 2022 el buque mercante japonés Soleil fue el primero en efectuar una navegación exitosa sin tripulación, incluido el zarpe, navegación y atraque en el muelle de destino, navegando 130 millas en 7 horas. Este buque, de 222 metros de eslora, tiene sistemas y sensores, incluidos radares, cámaras ópticas e infrarrojas y capacidad automática para atracar/zarpe de los muelles. El buque es controlado por un Centro de Comando en tierra utilizando comunicaciones satelitales y diversas tecnologías que le permiten navegar en forma segura.
De esta manera, los buques mercantes futuros sin tripulación podrán zarpar, navegar miles de millas, recalar y atracar, controlados en forma remota por una central en tierra y, a más largo plazo, podrían navegar en forma completamente autónoma, una vez que los desarrollos tecnológicos lo permitan, teniendo siempre presente los riesgos inherentes de la ciberseguridad y la dependencia de las comunicaciones satelitales y del GPS.
Estos buques mercantes sin tripulación, controlados en forma remota podrían constituirse por sí mismos en eventuales “embarcaciones kamikazes”, ya que desplazan miles de toneladas que pueden impactar con gran precisión a cualquier buque en puerto o instalación marítima existente, causando un alto nivel de daños.
Paralelamente, varias armadas han estado desarrollando diversos buques o embarcaciones de superficie (y submarinas) no tripuladas que cuentan con una gran variedad de sensores, para utilizarlas en tareas de vigilancia, obtención de inteligencia, apoyo logístico a las fuerzas navales, como plataformas portadoras de armas, o como “embarcaciones kamikazes” dotadas con explosivos, como son las que está utilizando Ucrania contra Rusia.
A continuación, se describirán los ataques más importantes en que han participado estas “embarcaciones kamikazes” ucranianas y sus efectos.
O Ataque a la base naval rusa de Sebastopol: El día sábado 29 de octubre de 2022, alrededor de las 0400 horas, se inició un ataque coordinado de 7 “embarcaciones kamikazes” y 9 drones ucranianos a los buques rusos ubicados en la base naval de Sebastopol, en Crimea.
Las informaciones de este ataque son contradictorias. Los relatos de lo que ahí ocurrió son confusos, fue una noche de intensos combates. Las 7 “embarcaciones kamikazes” ingresaron a la base naval de Sebastopol y al amanecer se veían a la distancia gruesas columnas de humo negro. Se estima que fueron seriamente averiadas la fragata Makarov (buque insignia de la Flota del Mar Negro), el dragaminas Iván Golubets y otros dos buques de guerra no identificados.
Los rusos fueron completamente sorprendidos en este ataque y los daños causados fueron cuantiosos.
Esta acción naval se efectuó a una distancia desconocida del centro de control de las “embarcaciones kamikazes” y drones. Se asume que estaba ubicado a más de 250 millas de distancia del lugar del ataque.
O Ataque al puente que une Rusia con Crimea: El 17 de julio de 2023 “embarcaciones kamikazes” ucranianas explotaron bajo el puente que une Rusia con la península de Crimea, dañando esta infraestructura crítica y logrando suspender por algunos días el uso de esa vía de comunicaciones. Se estima que participaron al menos dos “embarcaciones kamikazes” en este ataque.
O Ataque al buque anfibio ruso Olenegorsky Gornyak: El 4 de agosto de 2023, en el puerto ruso de Novorossiysk (ubicado al oeste de Crimea), principal puerto ruso ubicado en el Mar Negro2, fue atacado por una “embarcación kamikaze” ucraniana el buque anfibio Olenegorsky Gornyak quedando seriamente averiado, debiendo ser remolcado a puerto.
Por el video difundido del ataque en las redes sociales no se aprecia ninguna reacción del buque ruso durante el ataque, por lo que se deduce que se logró la sorpresa.
Esta es la primera vez que las “embarcaciones kamikazes” ucranianas atacaron a una distancia superior a 400 millas de su supuesta central de control ubicada en tierra.
El puerto de Novorossiysk tiene importancia estratégica y económica no solo para Rusia, sino que a nivel mundial, porque por este terminal marítimo se exporta el 2% del suministro de petróleo global y decenas de millones de toneladas de granos.
Este ataque ocurrió en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas en el Mar Negro, después de que Rusia hubiera desahuciado el acuerdo de exportación de granos de Ucrania en el mes de julio pasado y ha estado atacando sostenidamente a los puertos de ese país.
O Ataque al petrolero mercante ruso Sig: El 5 de agosto fue atacado exitosamente por una “embarcación kamikaze” ucraniana el petrolero mercante ruso Sig en el estrecho de Kerch, en las cercanías del puente que une Rusia con Crimea. El buque quedó seriamente averiado.
Adicionalmente, Ucrania declaró a los 6 puertos rusos existentes en la Mar Negro como “zona de guerra”.
¿Cómo son las “embarcaciones kamikazes” ucranianas?
Las “embarcaciones kamikazes” ucranianas son relativamente pequeñas, no tripuladas, y tienen aproximadamente 5 metros de eslora. A diferencia de los drones que operan en el aire, estas operan sobre la superficie del mar. Pertenecen a la categoría de vehículos de superficie no tripulados (o USV´s), cuyo rol particular es neutralizar o destruir buques o instalaciones marinas ubicadas en los puertos.
Una de las características comunes de las “embarcaciones kamikazes” son los “drones kamikazes”, que además de autodestruirse al impactar el blanco, sus sensores transmiten imágenes al centro de control ubicado en forma remota, desde donde se adoptan las decisiones y se controla su navegación (o vuelo en el caso en los drones) hacia el objetivo a atacar.
Estas “embarcaciones kamikazes” no existían al inicio de esta guerra y se desarrollaron en un tiempo récord por Ucrania.
Desplazan alrededor de 1.000 kilos y están basadas en motos de agua de origen canadiense. Alcanzan 45 nudos de velocidad y cuentan con una distancia franqueable de alrededor de 450 millas.
La moto de agua original fue rediseñada, bajo su nueva superestructura, donde se encuentran la antena de comunicaciones satelitales, distintos sensores, el sistema de control y los cerca de 200 kilos de explosivos que detonan al impactar el blanco. Tienen un costo de alrededor de US$250.000 dólares por unidad.
Consideraciones finales
Las “embarcaciones kamikazes” ucranianas han demostrado ser armas de alta precisión y efectividad para atacar a buques en puerto y a la infraestructura crítica marítima existente.
La capacidad de navegación sin tripulación de los buques mercantes futuros los puede transformar en sí mismos en “embarcaciones kamikazes” con potenciales efectos devastadores.
Las “embarcaciones kamikazes” podrían ser desplegadas, teóricamente, por buques de guerra y mercantes en cualquier área marítima.
El ataque a la base naval de Sebastopol con “embarcaciones kamikazes” y drones, actuando en forma simultánea y coordinada, se convirtió en un hito, por ser el primer ataque de este tipo, estableciendo un antes y un después en la historia naval.
Así como el ataque aeronaval efectuado por la armada británica a la base italiana de Taranto en 1940 marcó el precedente del ataque japonés a Pearl Harbour en 1941, el ataque con “embarcaciones kamikazes” y drones a Sebastopol podría volver a repetirse a mayor escala con posibles efectos catastróficos sobre otra marina que sea afectada.
Del mismo modo que los “drones kamikazes” han tenido un gran efecto en la guerra terrestre entre Rusia y Ucrania, los ataques de las “embarcaciones kamikazes” ucranianas han tenido implicancias relevantes en la guerra naval en el Mar Negro, aumentando los niveles de tensión en esa área geográfica a altos niveles, considerando que Bulgaria, Rumania y Turquía son países rivereños de ese mar pertenecen a la NATO.
La aparición de esta nueva amenaza asimétrica probablemente tendrá efectos en el desarrollo de novedosas estrategias de ataque y defensa de las líneas de comunicaciones marítimas.
Lista de referencias
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Año CXXXIX, Volumen 142, Número 1002
Septiembre - Octubre 2024
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