La presencia de una flota de 260 pesqueros asiáticos efectuando faenas de pesca frente a las Islas Galápagos en el mes de agosto pasado, junto a las 366 naves evidenciadas recientemente en aguas internacionales próximas a la zona económica exclusiva en el norte de Chile ha continuado generando alarma en los países del Pacífico sur occidental, dado que la masiva captura de especies transzonales puede impactar la biodiversidad, afectando a los ecosistemas marinos y las respectivas economías costeras de la región.
Flota pesquera chinasMientras Sudamérica y el mundo continúan luchando contra la crisis sanitaria generada por la pandemia del coronavirus, frente a las costas del Pacífico sur fue descubierta en el mes de agosto del presente año una gran flota de embarcaciones pesqueras frente a las islas Galápagos. La mayoría de los barcos son de nacionalidad china y algunas embarcaciones enarbolaban bandera de conveniencia.
También componían la flota pesquera buques factorías, frigoríficos y logísticos que eran de similares características a núcleos flotantes avistados en años anteriores en las mismas aguas del océano Pacífico sur occidental (Andes Azules).
La flota se ha ido desplazando al sur en búsqueda de la jibia y se ha mantenido realizando labores extractivas en aguas adyacentes a la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Perú y Chile, encontrándose la primera semana de este mes de octubre en aguas internacionales a 400 millas al Weste de Mollendo, en el sur de Perú, próximo al límite marítimo internacional entre ambos países, por lo que hasta la fecha no se ha vulnerado el derecho internacional marítimo en relación a la explotación de recursos en aguas jurisdiccionales de los países de la región (Toro, 09/10/20).
La fría corriente de Humboldt que corre de Sur a Norte desde Chile hasta espacios marítimos ecuatorianos, frente a las costas sudamericanas, nutre a sus aguas de una gran biodiversidad marina lo que convierte a sus países entre los mayores exportadores de productos del mar en el mundo. Tal realidad atrae a flotas pesqueras foráneas que navegan grandes distancias, principalmente del continente asiático, en demanda de los recursos marinos existentes en la cuenca marina del estanque suramericano occidental.
La situación descrita, ha derivado en una preocupación permanente para los Estados y las armadas del Pacífico sur, las cuales han intensificado los patrullajes y la fiscalización de sus aguas de responsabilidad, en orden a otorgar el debido resguardo a los intereses marítimos de sus respectivos países.
El día 18 de agosto pasado se cumplieron 68 años de la declaración sobre zona marítima de las 200 millas, conocida como la “Declaración de Santiago,” suscrita en nuestra capital por los Gobiernos de Chile, Ecuador y Perú y a la que Colombia posteriormente adhirió el año de 1979. El origen de la CPPS data del año 1952 cuando se firmó el documento fundacional, el cual dio cuerpo a una institución dedicada a velar por los intereses marítimos regionales a perpetuidad, al elaborar un documento en cuyo texto en su preámbulo señala: “los gobiernos tienen la obligación de asegurar a sus pueblos las necesarias condiciones de subsistencia y de procurarles los medios para su desarrollo económico” (Comisión Permanente del Pacifico Sur, s. f.).
Este organismo regional marítimo, con sede en el puerto de Guayaquil en Ecuador, conforma una alianza estratégica, política y operativa en el Pacífico sudeste dedicada a promover la conciencia marítima, la investigación científica y, especialmente, la conservación de los recursos vivos en la zona marítima de los Estados partes.
Particularmente su comité ejecutivo, tras la operación de la flota de 260 pesqueros chinos en los límites de las fronteras marítimas de las aguas jurisdiccionales de Ecuador, condenó el hecho, y acordó convocar a una asamblea extraordinaria para identificar las posibles acciones conjuntas orientadas a afrontar las situaciones de Pesca Ilegal No Declarada y No Reglamentada (INDNR) que tengan incidencia en el Pacífico sudeste.
La ORP-PS fue patrocinada por Australia, Nueva Zelandia y Chile el año 2009 y su propósito fue la creación de un organismo regional de carácter multilateral destinado a resguardar la conservación en el largo plazo y el uso sostenido de los recursos pesqueros transzonales y, al hacerlo, salvaguardar los ecosistemas marinos en que existen esos recursos. En forma particular Chile formalizó su incorporación el año 2012, por medio del Decreto Supremo N° 89 del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREL).
Actualmente la integran más de 15 países (Australia, Belice, Chile, República Popular China, Islas Cook, Cuba, Ecuador, Unión Europea, Islas Feroe, República de Corea, Perú, Nueva Zelanda, Rusia, China Taipei y Vanuatu). También cuenta con Estados cooperantes que son Colombia y Francia por sus territorios insulares, Liberia, Panamá y Estados Unidos. Gran parte de sus esfuerzos se encuentran orientados a la protección de la biodiversidad en el medio marino internacional, en zonas de alta mar del océano Pacífico sur y especialmente a la lucha contra la pesca ilegal INDNR, actividad que pone en riesgo la flora y fauna de los mares regionales.
Particularmente, para el caso del recurso jurel, en el área delimitada por la organización, existen cuotas de captura anual para asegurar la continuidad de esta especie.
Alexander von Humboldt, fue un geógrafo y astrónomo con vocación científica pero, ante todo, un explorador incansable. El año 1802, durante su expedición por América, se embarcó en una aventura que lo llevó desde las costas sudamericanas occidentales hasta Baja California, lo que es México hoy. Entre los hallazgos científicos encontrados, destacó el estudio de la corriente oceánica de la costa colindante al océano Pacífico de Sudamérica que lleva su nombre. A través de sus conocimientos, descubrió un movimiento de masas que producto del movimiento de la Tierra empuja las aguas profundas, a la cual no les llega el sol, y por lo tanto más frías, hacia el Norte y hacia la superficie. Ello desde la provincia de Atacama de Chile hasta los límites entre Perú y Ecuador, extensión en la cual sus aguas son aproximadamente 10º más heladas que otras zonas del Pacífico sur, por lo que su temperatura promedio oscila en torno a los 14° C, que, a diferencia del resto del océano frente a Sudamérica, se alza sobre los 24° C de temperatura (BBC News, 15/09/2020).
Esto no solo enfría el agua de la superficie si no que se irradia a los ecosistemas costeros a su paso, por lo que en Chile el desierto de Atacama presente en las regiones de Arica, Tarapacá, Antofagasta y Atacama se debe en gran parte al frío y la sequedad que genera la corriente en el ambiente de sus costas. De hecho, la biodiversidad de las islas Galápagos, que le deben su riqueza a esta corriente, fue el escenario perfecto para que Charles Darwin avanzara en su reveladora teoría de la evolución de las especies.
También hace que en Perú, zonas que podrían contar con climas tropicales, sean más bien secas y áridas. Sus profundas columnas de aguas ricas en plancton emergen hacia la superficie, lo cual sirve de alimento a una gran cantidad de animales marinos. Por ejemplo, a lo largo de este corredor marino, gracias a este fenómeno hay pingüinos en la zona ecuatorial, además conviven calamares gigantes y cerca de 70 especies de tiburones, leones marinos, ballenas y otros cetáceos que viajan de polo a polo. La gran cantidad de alimentos que alberga la corriente también resulta atractiva para las más de cuatro millones de aves que habitan la región (BBC News, 15/09/2020). Es tal la cantidad de alimento que la zona es considerada el ecosistema marino más rico del planeta y el área pesquera más productiva del mundo
Un factor relevante para considerar en sus aguas corresponde a la alta tasa migratoria de sus especies, por lo que, incluso, a varios de los peces presentes en sus aguas se les ha denominado los peces sin patria, como el atún o el jurel, por ejemplo.
En el siguiente grafico se visualiza cómo la riqueza existente en la corriente de Humboldt sitúa a Perú y a Chile, pese a no contar con las ZEE de mayores dimensiones a nivel global, entre los primeros 10 productores de pescado en el mundo y, por otra parte, a China como la primera potencia pesquera del planeta.
La continua incursión de flotas asiáticas en los mares del Pacífico sur frente a las costas sudamericanas, se ha transformado en un tema de alta prioridad para la CPPS y para las Armadas y organismos afines de los países de la región. La reciente presencia de una flota china navegando frente a las costas ecuatorianas, peruanas y chilenas ha generado una alarma regional demandando una gran dinámica en los medios de prensa locales, dado que esta presencia pesquera extranjera ha tenido un sostenido aumento durante los últimos años, tal como se presenta en el cuadro a continuación (Agencia AP, 24/04/2019), (Toro, 09/10/20):
| Año | Cantidad de pesqueros |
| 2017 | 297 |
| 2018 | 300 |
| 2019 | 245 |
| 2020 |
260 frente a Ecuador 366 frente a Chile |
Esta sostenida avalancha pesquera extranjera se encuentra afectando la diversidad de especies marinas que migran a lo largo de la corriente de Humboldt.
La Armada del Ecuador, por medio del monitoreo satelital fue la que alertó la presencia de esta flota, por lo que antes estas evidencias esa institución naval ha incrementado la presencia de sus unidades en sus ZEE continental e insular, reforzando las operaciones de vigilancia y fiscalización en el área (Agencia AP, 24/04/2019) (Ibarra, 28/07/2020).
Cabe recordar que el año 2017, la Armada del Ecuador capturó al interior de los límites de la reserva marina de Galápagos un barco de bandera china con 300 ton de fauna marina, incluidas especies de tiburón en peligro de extinción (AFP, 14/08/2017). Además, en la actualidad, frente a las costas de las islas Galápagos han arribado desechos plásticos, los cuales la población local ha ligado a parte de la basura generada por estos pesqueros extranjeros que circundan el archipiélago. Residuos que también afectan a su fauna insular, la cual tiene una de las mayores concentraciones de especies de tiburones del mundo. Entre ellas se encuentra las variedades de tiburón ballena y pez martillo, ambas en peligro de extinción (El Universo, 08/08/2020).
Gráfico proporcionado por la Cancillería de Ecuador, julio 2020.
El Estado de Chile ha respaldado la Agenda 2030 del Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cuyo objetivo N° 14 se relaciona con la conservación y el uso sostenible de los océanos.
Enmarcado bajo la iniciativa ambiental internacional descrita, es que Chile, entre otras varias actividades, promulgó por medio del Decreto Supremo N° 5 del Ministerio del Medio Ambiente (MMA) del 24 de agosto del 2016 la creación del Área Marina Protegida (AMP) Nazca Desventuradas, en torno a islas San Ambrosio y San Félix y muy próximo a las columnas de agua que fluyen por la corriente de Humboldt en el área norte del país. En su artículo N° 5 se le encomienda a la Armada de Chile junto al Servicio Nacional de Pesca (SERNAPESCA) la fiscalización y el control de los 300.00 km2 que componen sus aguas, a fin de dar soporte a la protección de la biodiversidad marina en coordinación con la Subsecretaría de Pesca (SUBPESCA) y el MMA y de esa manera poder mitigar los efectos de la depredación por parte de naves pesqueras extranjeras y nacionales en el AMP establecida.
La Armada de Chile, en virtud del área de misión relacionada con la seguridad e intereses marítimos, para el control de flotas pesqueras extranjeras y resguardo de sus espacios marítimos desde el año 2015 se encuentra desplegando dos tipos de operaciones que se efectúan dentro y fuera de la ZEE Las Operaciones de Vigilancia Oceánica(OVO) que son desarrolladas por medios operativos de las Zonas Navales dentro de la ZEE y las Operaciones de Fiscalización Pesquera Oceánica (OFPO) que realiza el Comando de Operaciones Navales (COMOPER) en coordinación con la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante (DGTM), organismo institucional que cuenta con la información histórica de caladeros y movimiento de las flotas extranjeras en las aguas colindantes a nuestra ZEE durante los distintos meses del año; cúmulo de antecedentes que permiten calendarizar tales operaciones que tienen por objeto el monitoreo y vigilancia de las actividades pesqueras que se desarrollan en la alta mar adyacente a nuestras aguas jurisdiccionales. Especialmente, en torno a la frontera marítima de las 200 millas, de manera de advertir algún eventual ingreso de pesqueros extranjeros a nuestra ZEE
Lo anterior, dado que, en la alta mar, de acuerdo con la normativa internacional, no existen delitos frente a la depredación indiscriminada de especies, solo hay infracciones pesqueras que deben ser resueltas por las respectivas organizaciones pesqueras regionales una vez que son denunciados los hechos. Ello hace necesario contar con medios de vigilancia que permitan obtener registros fílmicos sobre actividades ilícitas de pesca, de manera que puedan ser presentados como testimonios gráficos al momento de buscar sanciones para los infractores y de esa forma alejar a esas embarcaciones en forma definitiva de los Andes Azules y de aguas jurisdiccionales de Chile.
A raíz de la iniciativa institucional descrita, durante el presente año se han destacado medios aeronavales y unidades de la Escuadra al área de Chiloé, el golfo de Penas, el canal Beagle y estrecho de Magallanes con la participación de las fragatas (FF) Riveros, FF Williams y FF Blanco respectivamente. Además, la navegación de la FF Cochrane al área norte del país con el propósito de realizar una Operación de Fiscalización Marítima II (OFM-II), para la vigilancia y control de aguas de jurisdicción nacional.
Similar situación ha ocurrido con el OPV Fuentealba en tareas de fiscalización pesquera en aguas antárticas, conforme a las obligaciones internacionales asumidas por Chile y su Armada ante la Comisión sobre la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos. (CCAMLR).
Con el transcurso del tiempo, también se han incorporado herramientas satelitales y su integración a salas de análisis de la DGTM, por lo que esta tecnología ha complementado el tradicional trabajo de fiscalización realizado por el binomio buque- avión para el control y resguardo de nuestras fronteras marítimas.
En particular, mencionar también el aporte de la Fuerza de Submarinos que se ha integrado a las labores de fiscalización de los espacios marítimos nacionales; en especial, por el combate contra la pesca ilegal INDNR.
Es así como en el mes de junio del presente año, el Submarino (SS) Simpson traqueó y fiscalizó a una flota china compuesta por aproximadamente 100 naves pesqueras y sus barcos de apoyo logístico desde Talcahuano hasta el Archipiélago de Juan Fernández de manera que transitaran por nuestras aguas, pero sin explotar los recursos vivos marinos pertenecientes a todos los chilenos (Rodríguez, 25/06/2020).
De hecho, este tipo de fiscalización se enmarca en las tareas encomendadas a los Estados miembros que han adherido a acuerdos internacionales para la fiscalización pesquera, como es el acuerdo ONU de Nueva York de 2015, tratado del cual nuestro país forma parte.
La irrupción de flotas extranjeras en las aguas del Pacífico sur se ha ido incrementando los últimos años, impactando a la biodiversidad y ecosistemas existentes en la corriente de Humboldt que baña las costas de los Andes Azules.
La pesca para Perú, Chile, Ecuador y Colombia genera muchas fuentes de trabajo a nivel de los respectivos países y aporta de manera sustantiva a sus Productos Interno Bruto (PIB), realidad que insta buscar el diseño de estrategias comunes en resguardo de esta importante actividad económica que contribuye al bienestar de los habitantes de la región.
La ORP-PS y la CPPS como organismos regionales encargados de mantener equilibrio sobre la conservación de la biodiversidad junto al uso sostenido de los recursos pesqueros transzonales deben continuar verificando que los países miembros de sus respectivas organizaciones por un parte cumplan con las cuotas de captura establecidas anualmente en la región y también velen por el resguardo del medio ambiente marino. En tal sentido, ojalá en el futuro cercano, la ORP-PS además del recurso jurel establezca cuotas de pesca al recurso jibia, calamar gigante y bacalao, de manera de actuar como mecanismo regulador para la subsistencia de estas especies en los mares del Pacífico sur.
Las herramientas satelitales se han posicionado como un elemento de vanguardia en el control de los espacios marítimos jurisdiccionales en Chile y la región, dada su alta eficiencia y su capacidad de reacción instantánea, además de la entrega de información a tiempo real a la prensa y a la comunidad sobre la reacción del Estado ante eventuales vulneraciones a su ZEE y soberanía.
La creación de AMP en nuestro país le ha ampliado el horizonte operativo e inter agencial a la Armada, al interactuar en forma externa con un mayor número de actores estatales (SERNAPESCA, SUBPESCA, MMA, MINREL, etc), además de la sinergia en el plano interno alcanzada entre COMOPER, Zonas Navales y DGTM para el cumplimiento de sus funciones relacionadas con la tutela del aprovechamiento racional y sustentable del océano y de sus recursos vivos.
Además de la vigilancia otorgada por la exploración aeromarítima y los medios navales y marítimos, los submarinos han demostrado ser un sensor eficaz para el seguimiento y control de las flotas pesqueras extranjeras que navegan en tránsito por nuestra ZEE con rumbo a la alta mar. Lo anterior, refuerza la polivalencia de la Armada para cumplir con sus tareas de resguardo de la soberanía del mar de Chile y conjuntamente brindar soporte al desarrollo del país a través de la protección de los recursos pesqueros perteneciente a todos nuestros compatriotas.
La Armada de Chile, pese al complejo escenario de pandemia que se vive, ha continuado con su labor permanente de control en salas de mando relacionado con la vigilancia y fiscalización de aguas jurisdiccionales. Por otra parte, también ha hecho lo propio en AMP y aguas antárticas derivado del cumplimiento de acuerdos internacionales que ha suscrito nuestro país en torno a la protección de los recursos vivos existentes en esos espacios marítimos. Con ello, respalda que es parte de un país con preeminencia marítima que no claudica ante la adversidad sanitaria reinante para cumplir con una de las tareas primordiales de su misión en cuanto al control y custodia de los intereses marítimos de la nación.
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Lista de Referencias
Bibliografía
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Debido a su posición geográfica, Chile es un actor importante en la cuenca del Pacífico, una macro región en la que conf...
Los océanos representan cerca del 70% de la superficie terrestre y en ellos la actividad humana se incrementa vertiginosamente, impulsada por el desarrollo económico y facilitada por la tecnología, extendiéndose allende los límites soberanos y más allá de zonas con derechos de explotación de Estados ribereños, lo que afecta a todo el ecosistema marino, incluyendo extensos espacios que son patrimonio común de la humanidad. Para un correcto uso de los océanos se propone implementar una condición equivalente al concepto de Estado de derecho, la que requiere del concurso e interoperabilidad jurídica de fuerzas navales y marítimas de Estados regionales interesados.
Pregunta recurrente en nuestro ámbito marítimo, de transversal apoyo o rechazo y de antiguas aspiraciones, como aquella ...
El Acuerdo sobre la Aplicación de las Disposiciones de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR), de 10 de diciembre de 1982, relativas a la Conservación y Ordenación de las Poblaciones de Pesca Transzonales y las Poblaciones de Peces Altamente Migratorios, conocido también como Acuerdo de Nueva York, es un acuerdo marco que implementa algunas disposiciones importantes de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. El acuerdo establece principios básicos sobre los cuales deben administrase los recursos pesqueros, así como establece los lineamientos y criterios generales para la creación y reforzamiento de las Organizaciones Regionales Pesqueras y sus mandatos para la conservación y manejo sustentable de los recursos en el largo plazo.
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Septiembre - Octubre 2024
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