Este es un libro de operaciones navales, específicamente de rebusca y rescate, en un escenario adverso y complicado como es el Atlántico sur, pero también es un libro que da cuenta de la naturaleza humana. Su autor, capitán de fragata (R) de la Armada Argentina, si bien no fue testigo directo de las operaciones que describe con mucho detalle, producto de un arduo trabajo que le tomó más de tres años, revive los dramáticos momentos del hundimiento del crucero ARA General Belgrano y las consecuentes operaciones para rescatar a los sobrevivientes, basándose en entrevistas, diarios personales y documentos oficiales. En su libro, Cavalieri no se remite únicamente a esas operaciones, sino que también describe el estado operativo en que se encontraban las unidades de la Flota de Mar argentina y el alistamiento de su personal, mencionando las limitaciones propias de la antigüedad del material y la carencia de repuestos, marco absolutamente necesario para entender las limitaciones con que se operaba y las iniciativas desplegadas para suplir aquello que faltaba o no era posible obtener. Hasta la última balsa es un libro que interesará al lector que conoce las aguas australes próximas al Cabo de Hornos y del Atlántico sur. Profesionalmente es enriquecedor y su lectura es cautivante, ya que permite revivir un hecho tan trágico como es el hundimiento de un buque, la incertidumbre y la carrera contra el tiempo para rescatar a los tripulantes que sobrevivieron al ataque y que posteriormente enfrentaban las difíciles y duras condiciones que implica permanecer en una balsa en una zona de muy bajas temperaturas y de tempestades con viento y olas de gran magnitud. En los aspectos navales, llama la atención las temerarias acciones de los pilotos de los aviones empleados en la exploración del área, los preparativos en los destructores y, en particular, la perseverancia del comandante del ATF Gurruchaga, que con los pocos medios y capacidades que disponía, se empeñó en brindar a los rescatados no sólo apoyo material y sanitario, sino que también humanizó la tarea a cumplir, transmitiendo contención y afecto a los sobrevivientes, actitud que irradió con su ejemplo a toda la dotación. Sin duda que lo más impactante de esta obra, son los testimonios personales. De ellos se rescatan las más nobles virtudes humanas, tan olvidadas en la convivencia diaria, y resulta paradójico que ellas surjan en momentos de grandes tragedias. Por ello, este libro no solo resulta de interés para quienes están vinculados al mar, sino que también para todo ciudadano preocupado del devenir de su país y que constata a diario como su sociedad se desgarra en disputas ideológicas sin mucho sentido y que muchas veces se alejan de la naturaleza humana.