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Comentario: Mates and muchachos. Unit cohesión in the Falktands Malvinas war

  • Fecha de publicación: 01/04/1992. Visto 66 veces.

COMENTARIO MATES & MUCHACHOS. UNIT COHESION IN THE FALKLANDS/MALVINAS WAR Nora Kinzer Stewart, Brassey's (us), lnc. 1991. Teoría Introducción Omar Gutiérrez Va/debenito Capitán de Corbeta STE libro centra su atención en el Conflicto del Atlántico Sur, con el objeto de analizar la cohesión y la efectividad en combate de las fuerzas terrestres involucradas. Su enfoque sociológico se basa en un esquema teórico que comienza con Edward Shils y Morris Janowitz hace más de cuarenta años, cuando a consecuencia de las entrevistas a los prisioneros de guerra alemanes se logra comprobar que la capacidad de resistencia de estos combatientes era función de la mantención de su integridad social. La guerra en el Atlántico sur (Falkland o Malvinas) entrega antecedentes importantes a los analistas militares, relacionados con la dimensión humana en el combate, toda vez que la guerra es decidida por hombres en el campo de batalla. A menudo esta dimensión humana es definida como espíritu de cuerpo, deseo de combatir, moral o cohesión. Generalmente, los analistas militares apuntan su enfoque hacia factores cuantitativos, tales como el grado de desarrollo tecnológico del país, el nivel de la tecnología militar, capacidad de Revista de Marina Nº 2/92 205 abastecimiento y el número de los combatientes, más que la calidad de sus componentes y menos el grado de interacción social alcanzado durante el entrenamiento, que lleva directamente a la eficiencia en el combate. A pesar de lo anterior, existe un número significativo de investigadores civiles y militares, sociólogos y sicólogos, que indican que factores humanos como la cohesión, el liderazgo, la confianza en los camaradas y en los comandantes de unidades, son extremadamente importantes para determinar el porqué los hombres son capaces de combatir y no de huir del campo de batalla. La moral, el espíritu de cuerpo o el deseo de combatir son utilizados a menudo como sinónimos de cohesión . No obstante, la doctora Kinzer ve los conceptos de moral, espíritu de lucha y deseos de ganar, como interdependientes de la cohesión. En cambio, pensamos que las unidades con gran cohesión también poseen una alta moral. La cohesión mil itar es un vínculo especial que implica que los hombres son capaces de morir en bien de la preservación del grupo, de su código de honor militar o por el honor del país. Un vistazo a la literatura muestra que la cohesión militar consiste en tres elementos fundamentales: Relaciones entre camaradas (horizontales), relaciones entre subordinados y superiores (verticales) y relaciones militares como una organización o unidad (institucionales). Pero como no se puede estudiar al soldado sólo a nivel de unidad e ignorar los aspectos de herencia social, cultural, económica y política de la nación, existe un cuarto tipo de enlace, que corresponde a las relaciones del militar, como individuo, con la sociedad y su cultura. Las relaciones horizontales involucran la formación de un sentimiento de confianza entre los oficiales, suboficiales o soldados. Algunos de los elementos que contribuyen a las relaciones horizontales son los siguientes: a. El sentido de la misión. b. La destreza técnica y táctica . c. La ausencia de confusión en el personal. d. El equipo de trabajo. e. La confianza, el respeto y la amistad. Las relaciones verticales implican la relación entre soldados, suboficiales y oficiales . Algunas características de estas relaciones que contribuyen a la cohesión militar son las siguientes: a. Un clima institucional jerarquizado. b. Comandantes interesados por sus soldados. c. Un líder que predica con el ejemplo. d. Confianza y respeto por los líderes. e. Las incomodidades y peligros compartidos. f. El entrenamiento compartido. Las relaciones institucionales, como organización o unidad, poseen las siguientes características: a. La lealtad a la patria y a sus valores. b. El patriotismo. c. La tradición militar e historia. d. La fe religiosa. e. El valor, el heroísmo y la masculinidad. Las unidades militares con un alto nivel de cohesión son más eficientes en el combate que las que poseen un bajo nivel. Sin embargo, existen otros factores tales como el desarrollo tecnológico del país y de la defensa, la logística, las condiciones físicas y entrenamiento del personal, la situación económica del país, etc., que también contribuyen a la eficacia en el combate. Estos factores son culturales o societales. Luego, algunos factores societales que contribuyen a la efectividad y cohesión militar son los siguientes: a. La cultura, las normas, los valores y la organización militar. b. El presupuesto de defensa. c. La doctrina y la estrategia . d. El entrenamiento. e. Las tácticas . f. El mando, el control, las comunicaciones e inteligencia . g. La logística, el abastecimiento y la tecnología. h. Los cuidados y servicios médicos. 206 Revista de Marina Nº 2192 Metodología La investigadora, basándose en un extenso repaso al material escrito sobre cohesión, moral, espíritu de cuerpo y eficiencia en el combate, desarrolla un modelo que incluye factores que aportan a las relaciones a nivel institucional, vertical y horizontal. Ella entrevistó a oficiales y conscriptos del ejército argentino en abril y agosto de 1987 y lo mismo hizo en el ejército y marina real británicos, en marzo y julio de 1989. Además, tanto en Argentina como el Reino Unido, la doctora Kinzer hizo contacto con analistas militares, siquiatras militares, profesores de historia militar y académicos militares. En Gran Bretaña entrevistó en profundidad a un total de quince oficiales (ocho de ellos infantes de marina) y a quince soldados (cinco de los cuales eran infantes de marina). También se reunió informalmente con oficiales de la 5a Brigada de Transporte Aéreo. Durante sus visitas a Argentina entrevistó a diez oficiales, dos soldados en servicio activo y a 21 soldado-conscriptos que estuvieron en las Malvinas y que en la actualidad están en condición de "veteranos de guerra", tres de los cuales eran infantes de marina. Resultados Con cuatrocientos años de tradición militar y una larga historia de conflictos internacionales, que implican grandes operaciones conjuntas de abastecimiento de las Fuerzas Armadas y desembarcos anfibios, las tropas británicas han dado muestra de una alta moral, espíritu de cuerpo y cohesión . Los soldados y suboficiales británicos declararon tener plena confianza en los conocimientos de sus oficiales para desempeñarse y guiarlos en el campo de batalla. Los suboficiales británicos son entrenados para asumir responsabilidades en todos los niveles de mando. Por otra parte, la doctora Kinzer indica que un clima institucional abierto, con escaso interés por marcar los privilegios del rango, acompañado de un ánimo positivo, conduce a una continua adaptación en el siempre cambiante campo de batalla, que lleva a un mejor desempeño en el mismo. Las deficiencias más importantes en el ejército argentino, durante el Conflicto del Atlántico Sur, fueron los significativos vacíos en las relaciones verticales y horizontales del personal, combinados con otros problemas de carácter social y militar, como son el entrenamiento, la inteligencia, la logística y el bienestar (alimentación y equipos adecuados, cuidado médico, etc.). Los soldados británicos, al igual que los Guardias de Gales y Escocia, pagaron un alto precio en aquellos lugares del campo de batalla donde sus tropas combatieron con grupos argentinos profesionales y bien entrenados, como es el caso de los infantes de marina y la Tercera Brigada de Artillería. Los factores sociales Gran Bretaña estaba convencida de que una guerra era necesaria para defender las Falkland del país agresor. Así, envió sus mejores tropas a las islas, formadas no sólo por personal experimentado pues, de hecho, la mitad de los reclutas británicos eran jóvenes con un promedio de veinte años de edad. Sólo algunos de los oficiales contaban con experiencia real en bombardeos navales y aéreos. Sin embargo, la tradición histórico-militar y el continuo entrenamiento y preparación de las Fuerzas Armadas en los ejercicios combinados de la OTAN, sumado a sus recuerdos de vivencias en la Segunda Guerra Mundial, Corea, Suez y Bélice y constantes obligaciones antiterroristas en Irlanda del Norte, permiten que las fuerzas británicas estén bien compenetradas en las tácticas y tengan rápidas respuestas en el combate. Por otra parte, las Fuerzas Armadas argentinas tenían plena convicción de la justificación histórica y política de su invasión a las Malvinas. A pesar de que las tropas estaban muy entusiastas por la liberación de las Malvinas y su lealtad y patriotismo eran apoyados por la enorme fe religiosa, muchos soldados revelaban sus dudas acerca de la habilidad que poseían para combatir en la batalla. No obstante que las fuerzas argentinas poseen una larga tradición de intervención en asuntos políticos, estratégicos y geopolíticos, su inexperiencia en el combate se hizo explícita en deficiencias en el abastecimiento, logística, comunicaciones e inteligencia. Sus mandos poseen sólo una experiencia reciente en la guerra subversiva. El conocimiento de los oficiales argentinos, basado en el aprendizaje de memoria, que les lleva a un agotamiento inducido en sus academias militares y en el recuerdo no viviente de las condiciones de la guerra moderna en el campo de batalla, trajo como consecuencia una actitud rígida e intransigente en las tácticas y doctrinas de batalla. Revista de Marina Nº 2192 207 Pese a que las fuerzas británicas tenían problemas de abastecimiento por razones de distancia, eran capaces de instalar guarniciones rápidamente. El abastecimiento británico y sus capacidades logísticas eran muy bien manejadas por sus oficiales. Las relaciones horizontales Los británicos construían brazos combinables y de ese modo operaban sus unidades, formadas por equipos; los lazos de confianza, respeto y amistad entre ellos eran extremadamente fuertes por razones de historia, entrenamiento y del tiempo vivido juntos en los cuarteles, practicando ejercicios o durante el largo viaje por mar desde Inglaterra. Aquellas unidades argentinas que habían entrenado juntas o al menos mantenido vinculados a sus soldados durante un año, como es el caso de la Tercera Brigada de Artillería , pudieron demostrar un sentido de equipo en el conflicto. Los oficiales argentinos mostraron un alto grado de relaciones horizontales debido a las relaciones personales cerradas que se llevaban a cabo en las academias de formación . El conscripto argentino conocía sus responsabilidades y resistencia . Con sólo 19 años de edad y un mes de entrenamiento, estaba consciente de su inadecuada preparación. En ellos existía una falta absoluta de relaciones horizontales con sus soldados-compañeros. Relaciones verticales En el caso de las tropas británicas en las Falkland, el clima institucional abierto, que se combinaba con el credo de los oficiales de proteger a sus hombres, servir ejemplarmente y compartir el entrenamiento y la incomodidad, condujeron a una increíble, fuerte y positiva relación por encima y bajo las dimensiones verticales de la estructura del mando, desde el soldado raso hasta el comandante de regimiento. Las fuerzas argentinas, por el contrario, son rígidas y sus hombres se relacionan raramente por sobre o bajo las cadenas del mando, especialmente entre conscripto y oficial. Los suboficiales poseen poca autoridad y responsabilidad y se desempeñan solamente en actividades administrativas. Los conscriptos están dentro y fuera de entrenamiento, de manera tan pasajera que el tiempo con el que se cuenta para implementar relaciones verticales es muy escaso. Un cuerpo rígido, altamente estratificado, produce escasa o ninguna relación de soldado a comandante. Por otro lado, un pequeño número de unidades argentinas mostró el mismo grado de relaciones verticales-horizontales descritas por los británicos. Aquellas unidades argentinas con conscriptos que habían completado un año de entrenamiento -como es el caso de la Brigada de Infantería, la Tercera Brigada de Artillería y la armada, o el caso especial de los Comandos 601 y 602- confiaban en sus comandantes, conocían sus armas y resistían el sufrimiento por los continuos bombardeos, frío, humedad, falta de alimentos, falta de sueño y la visión de sus compañeros soldados heridos y agonizantes. Conclusiones El análisis del Conflicto del Atlántico Sur demuestra que una simple estructura metodológica que toma en cuenta los factores asociados a los cuatro tipos de cohesión (societal, institucional, vertical y horizontal) constituye un método efectivo para el estudio de las dimensiones humanas referentes a la cohesión y su relación con la eficiencia en el combate. Asimismo, señala que la cohesión es una "fuerza multiplicadora". Aquellas unidades cohesionadas, tanto argentinas como británicas, tenían más éxito en el campo de batalla y más capacidad para soportar el clima y las deficiencias en el abastecimiento y logística, que aquellas unidades no cohesionadas.*

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